La deserción podría ser el embrión de un Ejército en apoyo de la creación de un Estado croata independiente, ya que ha desertado el 90% de los militares croatas, 7.800 de un total de 8.000. En varias ocasiones recientes los croatas amenazaron con boicotear las instituciones comunes. En respuesta a su declaración de autonomía a principios de mes, el alto representante civil de la comunidad internacional para Bosnia-Herzegovina, Wolfgang Petrisch, destituyó de su cargo a Ante Jelavic, el miembro croata de la presidencia colegiada del país.
Cualquier movimiento que persiga la creación de un nuevo Estado viola el acuerdo firmado en Dayton en 1995 y que puso fin a la guerra de Bosnia. Dayton dividió Bosnia-Herzegovina en dos entidades: la República Serbia y la Federación Croatomusulmana. Los nacionalistas croatas de Bosnia, que forman un grupo minoritario frente a los musulmanes bosnios en la federación, se consideran mal representados dentro del poder.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 29 de marzo de 2001