Una intoxicación alimentaria en la residencia de ancianos Els Arcs, en Figueres (Girona), ha originado la muerte de una de sus internas, de 92 años, y síntomas de gastroenteritis en otros 24 ancianos, tres de los cuales permanecían ayer ingresados en el hospital de Figueres. Los primeros indicios apuntan a que el brote se originó en un triturado de verduras que se ofreció en la cena del miércoles, destinado a los ancianos con problemas de masticación. El geriátrico es público, pero su gestión la lleva una empresa privada.
Sanidad ha abierto una investigación epidemiológica destinada a aclarar el caso, aunque la relación entre la comida triturada que se dio a algunos residentes y la intoxicación fue calificada ayer de 'evidente' por los técnicos sanitarios. La residencia depende del Departamento de Bienestar Social y tiene 84 ancianos residentes permanentes y una decena de diurnos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 31 de marzo de 2001