La rotunda descalificación de las propuestas del informe Roca sobre la organización territorial de Cataluña realizada el miércoles por la nueva consejera de Gobernación, Núria de Gispert, provocó ayer una no menos rotunda reacción de la ponencia parlamentaria que ha de elaborar las propuestas legislativas. Pero, en cambio, recibió un claro espaldarazo del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol. La ponencia decidió continuar sus trabajos, pese a que la posición del Gobierno les cierra toda expectativa de éxito, y solicitó la 'inmediata comparecencia' de De Gispert.
El líder del principal grupo de la oposición, Pasqual Maragall, calificó de 'error' la posición adoptada por la consejera y prefirió atribuirlo a su novedad en el cargo que ocupa y a una cierta precipitación a la hora de juzgar el informe Roca. 'Tal vez no se lo ha estudiado muy bien', añadió. Los demás grupos de la oposición se expresaron en idéntico sentido.
Incluso la diputada de CiU en la citada ponencia, Maria Eugènia Cuenca, se vio obligada a admitir que ningún miembro del Gobierno catalán puede desautorizar el trabajo de una ponencia parlamentaria. Mas contundente, el diputado socialista Oriol Nel.lo consideró 'impropio' que un miembro del Gobierno 'interfiera' en los trabajos de la Cámara y destacó que De Gispert 'vulnera los acuerdos contraídos por su antecesor, Josep Antoni Duran Lleida, para llegar a un consenso sobre la organización territorial'.
Pero si De Gispert actuó ciertamente en dirección contraria a la marcada por Duran Lleida meses atrás, no lo hizo en cambio en contra de lo que piensa Pujol. Desde Santiago de Compostela, Pujol expresó su total apoyo a las descalificaciones lanzadas el pasado miércoles por De Gispert a las propuestas del informe Roca. El presidente catalán reiteró que no se puede desoír el 'rechazo espontáneo' con que fue acogida la propuesta de unir municipios de menos de 350 habitantes, ni las voces de quienes creen que la propuesta diluye el papel de los consejos comarcales, y se mostró contrario a crear veguerías si no se puede suprimir antes las provincias.
De Gispert, que ayer se entrevistó en Madrid con el ministro del Interior, Mariano Rajoy, se ratificó en que una cosa es el informe 'técnico' y otra las posiciones políticas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 6 de abril de 2001