Enhorabuena, señor Ruiz-Gallardón, ya tiene usted cubierto el tratamiento gratuito para que dejen de fumar los funcionarios de la Comunidad de Madrid, según ha anunciado su Consejería de Función Pública. Con la mitad de lo que piensa recaudar a los discapacitados, que son 600 millones de pesetas, cubre con creces los 300 millones que supone tal medida hasta el momento.
Eso está muy bien: hay que ayudar a erradicar ese horrendo vicio, que tantas enfermedades produce; que ahí estamos nosotros, los minusválidos, para que, con las pensiones de 40.000 pesetas mensuales que recibimos del Estado, colaboremos a ese buen fin, ya que los pobres funcionarios tienen una renta per cápita tan baja que necesitan que se les financie el 100% de su tratamiento.
Por fin se les ve el plumero. Ánimo y adelante, presidente.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 6 de abril de 2001