La Unió de Llauradors espera que el Consell estudie y plantee soluciones para el sector de frutos secos, que este año dejará de percibir las ayudas que la Unión Europea estableció hace diez años. El fin de estas ayudas dejará al sector en una situación delicada, que dejará de percibir ayudas del 55% de los gastos e inversiones y que además, se ve afectado por los bajos precios que derivan de la competencia de países terceros. La organización agraria pedirá una entrevista de urgencia con la consejera de Agricultura, María Ángeles Ramón-Llin y se reunirá mañana para concretar una campaña de movilizaciones en defensa del sector.
La superficie destinada a estos cultivos, según la organización, ha disminuido un 10% en los últimos cinco años. Un descenso, causado por las masivas importaciones, que en cuestión de precios supone el 50% en el citado periodo. La Unió recuerda que el sector realiza una importante función económica y medioambiental en las zonas de interior.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de abril de 2001