Desde que el Plan Hidrológico entró en las Cortes, el PP ha incorporado proyectos de obras para ser declaradas de interés general (con cargo a los presupuestos del Estado) cuya justificación no está clara, según el portavoz socialista de Medio Ambiente, Víctor Morlán.
Así, el paquete de actuaciones en Aragón, por 25.000 millones de pesetas, responde a obras prometidas en campañas electorales y no ejecutadas. Figuraban en los acuerdos entre el anterior presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Tomas Sancho, y su hoy sucesor, José Vicente Lacasa, cuando éste último era consejero de Agricultura aragonés.
Dentro de la cuenca del Ebro se prima el riego a viñedos en la Rioja alavesa en perjuicio de los abastecimientos de Vitoria. En lugar de hacer un embalse en la cabecera del Bayas, como estaba previsto, se hará aguas abajo para canalizarlas hasta La Rioja, donde el PP dispone de clientela electoral.
En el anejo de inversiones figuran obras ya concluidas, como las del canal del Henares, Castrejón, Rosarito, Sorbe, Torcón, Colmenar Viejo, El Pardo, Algarrobo o Cazorla. Se han incluido, según el ministerio, porque faltan flecos por pagar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 16 de abril de 2001