Costa afirmó que alrededor de 250.000 contribuyentes valencianos, sobre un total aproximado que ronda los 1.250.000, se han beneficiado de los recortes introducidos en diversos tipos impositivos desde que Eduardo Zaplana accedió a la presidencia de la Generalitat.
El diputado del PP recordó que en 1997 se aprobó una ley autonómica para regular el tramo autonómico del IRPF y otros impuestos cedidos, que estableció deducciones por el nacimiento del tercer hijo; o para todos aquellos sujetos pasivos mayores de 65 años o discapacitados. También citó la deducción establecida para los jóvenes que acceden a su primera vivienda, las ayudas por la rehabilitación de viviendas o la deducción sobre inversiones con finalidad ecológica. Asimismo, recordó la deducción aplicada a las amas de casa, las modificaciones en el impuesto de sucesiones y donaciones, y las bonificaciones a la empresa familiar.
Sin embargo, Costa evitó mencionar el crecimiento sostenido de la deuda pública de la Generalitat en el mismo periodo, que ha aumentado cerca de 490.000 millones hasta situarse en 980.000 millones a finales de 2000. Lo que supone que cada valenciano, incluidos los menores de edad, debe en torno a 250.000 pesetas que, tarde o temprano, se detraerán de otros gastos.
Ajeno a la deuda, el portavoz de Hacienda del PP defendió el 'giro completo a la política fiscal en la Comunidad Valenciana' introducido por el Consell en el último lustro y apuntó que 'fruto de ello, se ha desarrollado, una política fiscal centrista, progresista y social'. Según la versión de Costa, 'el gasto social no consiste exclusivamente en gastar más en hospitales o colegios, sino también hacer pagar menos a los que menos tienen'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de abril de 2001