Tras dos años de reforma interior, el Palacio Augusti, el edificio que alberga el Museo de Bellas Artes de Vitoria reabrió ayer sus puertas. Ahora inicia una nueva etapa, en la que se centrará en el arte costumbrista, una vez que parte de sus fondos se han trasladado al Museo de Arte Sacro y, desde el próximo año, las obras de arte contemporáneo se trasladarán al Artium. Por fin, los cuadros que durante años han vivido en los sótanos del palacio podrán salir de nuevo a la luz. En la imagen, un miñón de gala en el acto de ayer.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 25 de abril de 2001