La ausencia del ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, se notaba tanto -sólo permeneció un rato en los escaños gubernamentales su compañero Jesús Posadas- que fue aprovechada por todos los portavoces de la oposición para recordar que la aprobación del Plan Hidrológico era un 'un paseo militar', en referencia a las célebres palabras del ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete.
El pleno se inició a las 10.30 y el ministro se presentó a las 11.45 cuando hacía uso de la palabra la portavoz popular, María Teresa de Lara, que dio paso a unas votaciones cuyo sesgo se conocía de antemano.
Pero en el proceso se notaron las ausencias de Amparo Marzal y de José Antonio Gallego, diputados socialistas por Murcia. 'El partido ha comprendido mis razones para no tener que votar en contra de un trasvase que siempre he defendido', declaró Gallego para explicar su ausencia. Ex alcalde de Lorca y ex presidente del PSOE murciano, Gallego confiesa que en los últimos meses se ha dejado la piel por lograr un consenso con el PP, infructuoso, 'porque el Gobierno no les ha ofrecido ninguna salida'. El portavoz del PSOE, Víctor Morlán, anticipó que su grupo lo corregirá 'en profundidad' cuando llegue al Gobierno. Durante su tramitación en la Comisión de Medio Ambiente, el proyecto de ley ha incorporado 62 enmiendas, 25 de CiU referidas al Delta del Ebro. El proyecto pasa ahora al Senado, donde no se espera que sufra modificaciones sustanciales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de abril de 2001