El Gobierno andaluz no tendrá complicaciones en su acción política diaria tras la dimisión de Ricardo Chamorro como diputado del PA, pero ésta sí puede 'generar algún problema' en el Parlamento al quedar la coalición en una mayoría absoluta justa con 55 diputados. Lo reconoció ayer en Jaén el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, quien no obstante restó importancia a la crisis andalucista y su repercusión en la Junta. 'Tenemos el compromiso formal del Partido Andalucista de que no va a haber ningún tipo de inconveniente, porque tanto ellos como nosotros somos conscientes de que lo que interesa a Andalucía es la normalidad', añadió el consejero.
La dirección del Partido Andalucista, indicó Zarrías, les ha asegurado que los tres parlamentarios que siguen en este partido no van a poner en peligro 'una conquista de los últimos años como ha sido la estabilidad política'. Es decir, que los tres diputados que quedan en el PA no seguirán el camino de Chamorro y Pedro Pacheco. 'Nos han hecho saber que sus problemas, en ningún caso, van a incidir en el normal funcionamiento del gobierno', sentenció Zarrías.
'Espero y deseo que el PA resuelva sus problemas de la mejor manera posible', indicó Zarrías aludiendo a la crisis del partido del socio de gobierno que tiene el PSOE en la Junta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de mayo de 2001