Un bando firmado por el alcalde de Calp, el popular Javier Morató, aconseja a la población que se abstenga de consumir el agua que abastece la red, después de que la empresa Aguas de Calpe haya observado un episodio de turbidez superior a la exigida por la normativa para considerarla potable. Según fuentes municipales, las condiciones del fluido son consecuencia de leves movimientos en el pozo debidos a los arrastres en el acuífero de Vall de Laguart (que abastece el término municipal) y motivan que agua se haya tornado turbia. La empresa estudia las causas que motivan los movimientos en el pozo. A pesar de que el agua no es potable se mantiene el suministro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 11 de mayo de 2001