El alto representante para la política exterior y de seguridadad de la UE, el español Javier Solana, hizo una de las intervenciones más polémicas de la mañana cuando realizó tres breves comentarios sobre los retos que plantea la consolidación de la democracia en países que han sufrido dictaduras y conflictos étnicos. 'Hablamos de democracia, pero no todos hablamos de lo mismo. Es un error creer que se pueden aplicar inmediatamente valores que nosotros hemos tardado siglos en incorporar', dijo el ex secretario general de la OTAN. Tras dejar muy claro que hay que 'potenciar la democracia' en todos los Estados, Solana mostró que el camino no será precisamente fácil. 'Como ha señalado lord Dahrendorf, el imperio de la ley y de la democracia no son lo mismo. Próximamente se van a producir votaciones en muchos países de los Balcanes y es muy posible que se produzca un triunfo de las mafias, con los que nos veremos obligados a legitimar lo peor de cada sociedad', señaló. En cuanto a las ONG, otro de los temas que surgieron durante el debate, el político aseguró que representan 'lo mejor pero también lo peor'. 'Actualmente hay mil ONG trabajando en Bosnia. ¿Creen ustedes que eso es razonable?', dijo.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 11 de mayo de 2001