La organización terrorista ETA amenaza la libertad de expresión en España, sobre todo en el País Vasco, e intenta 'instaurar un régimen de intimidación y miedo en los medios de información', según la Asociación Mundial de Periódicos (WAN) y el Foro Mundial de Directores (WEF). 'La situación es grave (...), los riesgos son elevados y el peligro es muy real', subraya el presidente de la WAN, Roger Parkinson, en un informe divulgado ayer sobre la visita que una delegación de estas asociaciones efectuó a finales de marzo pasado a Madrid, San Sebastián y Bilbao.
Esta delegación se reunió con representantes políticos, incluido el presidente del Gobierno, José María Aznar, y profesionales de medios informativos. Según la nota, cuando la jornada laboral de un informador empieza 'buscando una bomba debajo del coche, cuando es necesario instalar puertas blindadas y detectores de armas y explosivos en las oficinas de los diarios (...) y cuando los periodistas no pueden ir a buscar a sus hijos al colegio ni cenar dos veces seguidas en el mismo restaurante, la libertad de expresión está seriamente comprometida'. La WAN y el WEF piden a los políticos que no hagan declaraciones que puedan 'atizar el odio contra grupos o personas específicas'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de mayo de 2001