El tenor Plácido Domingo visitó ayer la Casa de la Villa para recibir la Medalla de Oro que le fue condecida por la corporación hace casi cuatro años, el 26 de septiembre de 1997. 'Hubierámos deseado entregársela antes, pero no ha sido posible', afirmó el alcalde, José María Álvarez del Manzano, que lamentó que 'Madrid es, a veces, un poco cicatera con sus hijos'. En su breve visita a la Casa de la Villa, Plácido Domingo, afónico por una dolencia de tráquea, coincidió en el salón de Tapices con un grupo de niños y profesores de la guardería San Miguel, de Surbatán (Latina). Ataviados con el traje goyesco, unos, y de chulapos, otros, los pequeños entonaron un chotis ante el alcalde en un acto que se repite desde hace 26 años. 'Vienen todos los años a visitar a los bomberos y al alcalde', explicó una de las asistentes. Fuera, en la plaza de la Villa, también había música, pero de protesta. Los empleados de la sala Caracol se manifestaron para recordar que el recinto sigue clausurado por la junta de distrito.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de mayo de 2001