El tirón de los merados de valores estadounidenses ha tenido un seguimiento confuso en Europa, donde los inversores siguen preguntándose por los efectos a medio plazo de la reciente rebaja de los tipos de interés en tiempos de inflación creciente.
En la bolsa española hubo de todo, pero se echó en falta la existencia de argumentos, de un hilo conductor que facilitara la toma de decisiones. Los grandes valores volvieron a encargarse de tirar del mercado, pero a última hora Telefónica se descolgó del proceso y dejó a los inversores sumidos en la confusión más absoluta.
Los índices consiguieron cerrar con un discreto avance, del 0,73% para la Bolsa de Madrid y del 0,77% para el Ibex 35, mientras que París destacaba con una subida del 1,27%. Londres terminó con una ganancia del 0,35% y Francfort del 0,29%, una reacción muy tibia debida al temor de los inversores a que la UE se quede atrás en el proceso de reactivación económica debido a la menor capacidad de respuesta de sus autoridades monetarias.
Los datos publicados ayer en Estados Unidos, los leading indicators, o índices de tendencia, y el índice de actividad de la FED de Filadelfia, coincidían en mostrar la debilidad de la situación económica, aunque los índices de tendencia subieron en abril debido a las mejoras en tipos de interés, oferta monetaria y precios de mercado, frente a un descenso de otros indicadores de actividad real.
La Bolsa de Nueva York ganaba a media tarde el 0,43%, 48 puntos, y el mercado Nasdaq un 1,45%, después de pasar por algunos altibajos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de mayo de 2001