El Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha la primera fase de su plan de viviendas de alquiler para jóvenes y espera entregar las llaves de los primeros 600 pisos en 2003, según informó ayer Antoni Santiburcio, segundo teniente de alcalde.
El objetivo es construir en 28 emplazamientos un total de 3.155 viviendas para alquilarlas a jóvenes con rentas bajas, en un periodo de tiempo limitado a cinco años y a un precio de entre 35.000 y 40.000 pesetas. El coste global de este plan de vivienda es de unos 8.000 millones de pesetas. Las viviendas tendrán una superficie media de 55 metros cuadrados construidos y unos 35 de superficie útil, aunque dispondrán de servicios comunitarios, como lavandería. Desde que el Ayuntamiento anunció la creación de este plan, en noviembre del año pasado, se han recibido 2.900 solicitudes de información.
Los jóvenes que deseen acceder a una de estas viviendas deberán ser menores de 35 años, vivir o trabajar en Barcelona y no ser propietarios de ninguna vivienda en la ciudad. En anteriores planes se pedía una renta inferior a 2,5 veces el salario mínimo interprofesional, pero el consistorio estudia elevar este baremo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 24 de mayo de 2001