El ministro de Exteriores alemán, Joscka Fisher, visitó ayer el museo donde se conmemora la muerte de seis millones de judíos a manos de los nazis. El ministro, que el día anterior visitó el lugar del atentado de Tel Aviv, que costó la vida a 20 personas, cumplió con la condición de ponerse la kipa antes de entrar en el museo. En su viaje, el titular de exteriores germano tiene previsto también visitar los territorios palestinos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 4 de junio de 2001