Telefónica CTC, la principal operadora de telecomunicaciones de Chile controlada por la española Telefónica, prepara el despido de cerca de 1.500 trabajadores de un total que ronda los 8.000. La operadora española suprimió 2.000 puestos de trabajo el año pasado.
La operadora viene registrando fuertes pérdidas desde mayo de 1999 como consecuencia de una revisión a la baja de los precios de las llamadas locales, que fue recurrida, sin éxito, en los tribunales. La compañía perdió 24,3 millones de dólares (4.617 millones de pesetas) en el primer trimestre de 2001.
El ajuste afectará también a la cúpula directiva de la compañía.Telefónica designó recientemente a Bruno Philippi, antiguo colaborador del dictador Pinochet para asuntos económicos como presidente de la compañía. Ayer, unos 300 empleados de CTC tomaron las oficinas de la compañía en Santiago como protesta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de junio de 2001