El empresario sevillano es individualista, poco creativo y busca sobrevivir a corto plazo, según se desprende de un estudio realizado por el profesor de Economía de la Universidad de Sevilla Francisco Javier Santos para la sociedad Sevilla Siglo XXI. El informe recoge aspectos psicológicos y sociológicos del empresario y el objetivo es que sirva para encontrar las razones del retraso del tejido empresarial sevillano respecto a otras regiones de la Unión Europea.
Entre estos argumentos el profesor Santos habla del fuerte peso del sector terciario, con más de un 71% de participación en el Valor Añadido Bruto provincial. Los empleos de este sector, especialmente los del turismo, son más estacionales e inestables que los que genera, por ejemplo, la industria, lo que se revela como una de las principales causas de las altas tasas de paro de la provincia.
Además, la investigación, realizada en empresas de menos de 100 trabajadores y a través de 300 encuestas, demuestra que el empresario sevillano tiene poca capacidad de planificación a largo plazo y no busca el desarrollo personal, sólo 'trabajar para vivir'. Los empresarios presentan carencias en formación, optan por empresas tradicionales y más del 83% no invierte en I+D, lo que le obliga a depender tecnológicamente de otras zonas geográficas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 7 de junio de 2001