Dos de los tres detenidos de una red dedicada a introducir en Europa mujeres de origen subsahariano -sobre todo de Nigeria- y obligarlas a prostiturse ingresaron ayer en prisión por orden del juez del juzgado de Instrucción número 15 de Valencia. El juez Vicente Ríos tomó declaración a los tres detenidos -un cuarto fue puesto en libertad por la policía- y ordenó el ingreso en Picassent de dos de ellos, un hombre y una mujer. Ambos captaban bajo engaño a mujeres de entre 19 y 24 años que introducían en Europa vía Togo y Mali para luego pasar a Francia o vía Marruecos para llegar a Ceuta. Les cobraban unos ocho millones y las amenazaban psicológicamente con ritos de vudú.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de junio de 2001