La Sala de Conflictos del Tribunal Supremo decidió ayer que el jugador rumano del Alavés, Cosmin Contra, deberá dirigirse a un juzgado de lo Contencioso-Administrativo para reclamar ante la federación y la Liga que se le reconozcan los mismos derechos que a un jugador comunitario.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 12 de junio de 2001