La hija de M. M. P., confesa parricida de Almenar (Segrià), ha quedado en libertad vigilada hasta la celebración del juicio de la madre. La joven fue detenida el 1 de junio, cuando la investigación de los Mossos d'Esquadra determinó que el crimen pudo ser planeado y ejecutado en familia, y que la detenida pudo participar como coautora o cómplice. El crimen ocurrió el 28 de febrero en el domicilio de la pareja en Almenar, donde J. G. S. falleció tras recibir un fuerte golpe en la cabeza. La autopsia reveló que la víctima tenía pequeñas heridas punzantes y que fue atado y rociado con un producto químico. M. M. P., que dijo padecer malos tratos de la víctima, declaró que mató a su compañero sola y en legítima defensa.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 13 de junio de 2001