El Gobierno de la Diputación de Guipúzcoa, de PNV-EA, y el grupo juntero socialista han llegado a un punto de encuentro para zanjar el bloqueo político que vive la provincia. El PSE ha decidido hacer 'un acto de buena fe en lo personal y en lo político' tras el llamamiento a 'rebajar la crispación política' realizado por el diputado general, Román Sudupe, después de las elecciones vascas. Los socialistas, según anunció ayer su portavoz juntero, Miguel Buen, están 'dispuestos a hablar, discutir y llegar a acuerdos' con la Diputación, en correspondencia al 'gesto aperturista' y los 'deseos de entendimiento' de los nacionalistas.
Miguel Buen manifestó ayer que el PSE en Guipúzcoa hará 'todos los esfuerzos para que EH no tenga la llave de la gobernabilidad en ninguna institución'. Con este planteamiento, su partido ha renunciado a presentar una enmienda a la totalidad a cada uno de los 18 proyectos de norma presentados por la Diputación para poder invertir este año 4.518 millones de pesetas (27,1 millones de euros) que no figuran en la prórroga presupuestaria. El PP, en cambio, ha pedido la devolución de todas las propuestas del Ejecutivo, y EH ha enmendado a la totalidad tres de ellas.
La Diputación de Guipúzcoa considera que la decisión del PSE-EE demuestra 'la actitud abierta y favorable' de los socialistas, y anuncia que 'será correspondida' por el Gobierno foral. El PNV-EA apoyarán las enmiendas parciales socialistas, que prevén invertir los 1.000 millones que destinaba la Diputación a amortizar deuda anticipadamente en 'actuaciones importantes', como el desdoblamiento de la N-1, la eliminación de barreras arquitectónicas o la compra de suelo industrial, dijo Buen.
Un portavoz foral reconoció que 'el nivel de coincidencia [con el PSE-EE] es importante', porque permite 'desbloquear proyectos clave para Guipúzcoa', en referencia a la construcción del Conservatorio de Música, la estación de autobuses o el parque de bomberos, entre otros proyectos.
Esta estrategia de los socialistas de llegar a acuerdos puntuales en las diputaciones y los ayuntamientos gobernados en minoría por los nacionalistas moderados responde a una iniciativa defendida por la secretaria institucional del PSE-EE, Gemma Zabaleta, que será sometida a debate en la Ejecutiva vasca de su partido este viernes.
En esta misma línea, el portavoz socialista en las Juntas Generales de Vizcaya, Josu Montalbán, afirmó ayer que su formación está dispuesta a llegar a fórmulas de entendimiento con el Gobierno foral de PNV-EA, también en minoría, para que salgan adelante los presupuestos del próximo año, evitando una nueva prórroga. Montalbán adelantó que la Diputación vizcaína presidida por Josu Bergara no encontrará en los socialistas 'un obstáculo permanente', sino 'una colaboración responsable.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 14 de junio de 2001