Ni la Plataforma por un solo Alarde ni Bidasoaldeko Emakumeak contemplan un 'no' por respuesta a la oferta lanzada ayer porque sienten que la suya es una propuesta de mínimos. Pero si se diera el caso, si ninguna compañía aceptara a las mujeres en sus filas, tampoco se quedarían en casa. 'Estaremos allí el día 30', dijo Castelló, 'aunque nos gustaría que fuera de forma consensuada y libre. (...) Estamos haciendo un esfuerzo muy grande y esperamos que ellos lo hagan también por el bien del pueblo de Irún'.
Los dos colectivos, que renunciaron hace unos meses a organizar el Alarde Oficial en aras a conseguir uno único e integrador, iniciaron ayer la ronda de contactos con los responsables de las compañías que integran el Alarde tradicional, respaldado por la mayoría de los vecinos de Irún, para ver si existen formaciones dispuestas a su integración.
Se niegan a tener exclusivamente representación en una compañía de nueva creación para evitar que quede convertida en un 'gueto' dentro del Alarde. Porque tienen además la firme convicción de que podrían exigir mucho más. 'Sabemos que el 30% de la ciudadanía comparte nuestras ideas. Haciendo esa equivalencia tendríamos derecho a integrarnos en seis compañías', advirtieron. En su discurso de ayer huyeron de la confrontación, abogaron por el diálogo y pidieron a partidos políticos e instituciones que se impliquen en la resolución de este conflicto en el que se enfrentan derecho y tradición y dos formas distintas de vivir unas mismas fiestas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 17 de junio de 2001