Un guardaespaldas de Aisha, la hija de Muammar el Gaddafi, el presidente libio, se ha metido en un buen lío con la justicia italiana por acosar a dos mujeres policías. El agente, que acompañaba a la única hija del líder libio -que tiene otros cuatro hijos varones- en un viaje por Italia, realizaba su trabajo de vigilancia en el hotel más lujoso de Milán, el Principe di Savoia. Estaba en la puerta de la habitación de Aisha, según cuenta La Repubblica. Después de varias horas, ya de noche, decidió que tal vez había llegado el momento de divertirse un rato. Y no se le ocurrió otra cosa que acosar a la mujer que tenía más cerca, una policía italiana que ayudaba en las labores de protección de los libios. La agente, indignada, pidió a una compañera, que también estaba en el pasillo, que le cambiase el sitio. Pero eso sólo agravó la situación, porque el libio la acosó también a ella, esta vez incluso con algún empujón. Desesperado ante las negativas, el guardaespaldas llegó a ofrecer incluso dinero a esta última policía. Al final acabaron todos en comisaría, y el libio se enfrenta ahora a una acusación de 'acoso y actos obscenos'.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 21 de junio de 2001