Anteayer por la noche, el salón de baile del Círculo de Bellas Artes se convirtió en un espacio cibernético-virtual de la mano de Carlos Serantes y apoyado por el exquisito sonido de los platos del decano de los pinchadiscos cultos, Jaimote. A la entrada estaban el bailarín colombiano Jim Guerra y el surfero neorrastafari David López vestidos de Al Capone y repartiendo calcomanías (falsos tatuajes) de emoticonos (lenguaje cifrado de los móviles). El sello Genie de Internet móvil (www.genie.es) convocaba así a la fiebre de los nuevos teléfonos wap, en medio de una luz azul hielo sideral y dando al personal a grifo abierto un imaginativo cóctel corporativo: un daiquiri color pitufo. Mar Saura presentó este ingenio futurista, que tenía alelados, entre otros, a los toreros Óscar Higares y Julio Aparicio. Allí también obsequiaban con un breve librito que desesperará a los venerables de la Real Academia Española: el Diccionario del castellano actual SMS, es decir, abreviaturas imposibles y crípticas con las que los jóvenes se comunican por telefonía portátil. Tres ejemplos: masticar: +tkr; nunca: nka, y estrés: s3. ¡El idioma ha muerto! ¡Viva el wap!-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 21 de junio de 2001