La huelga de autobuses urbanos en Jaén ha quedado desconvocada, al menos provisionalmente, como prueba de buena voluntad de la empresa y los trabajadores de cara a estudiar la oferta hecha pública por el concejal de Transportes, Manuel Peragón (PP), que ayer medió de nuevo para intentar poner fin a una protesta que ya ha vivido dos jornadas de paro.
La oferta municipal consiste en una subida a los trabajadores de 10.000 pesetas lineales el primer año (lo que representa una subida del 7,32%) y el IPC más un punto y medio el segundo año, todo ello además de exigir a la empresa Castillo, concesionaria del servicio, un compromiso de mayor estabilidad laboral de la plantilla.
La propuesta está lejos de las pretensiones iniciales de los trabajadores, que piden aumentos de entre 25.000 y 30.000 pesetas lineales para equiparar sus sueldos con los conductores de otras capitales andaluzas.
CC OO, convocante del paro, anunció ayer su disposición al diálogo con la empresa y para ello han retirado la convocatoria de huelga para el próximo día 26. A los sindicatos les preocupan también otros aspectos, como la regulación de las funciones de los trabajadores. Por su parte, la empresa Castillo -que sólo ofrecía una subida del 4%- también ha aceptado el diálogo.
La Unión de Consumidores ha pedido un esfuerzo a las partes involucradas para solucionar el conflicto: 'Y no contribuir a empeorar un servicio que está en entredicho por la incompetencia de la empresa concesionaria y del concejal de Transportes'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 22 de junio de 2001