El papel fundamental del euskera, definido como 'un tesoro que debe ser compartido por todos', ha sido debatido en un seminario celebrado en Bilbao y organizado por la Fundación Sabino Arana bajo el título El lugar del euskera en la sociedad vasca: presente y futuro. Sus conclusiones, presentadas ayer por el responsable de Prospección Sociológica del Gobierno vasco, Iñaki Martínez de Luna, definen al idioma vasco como 'el eje de nuestro pueblo' y se aboga por un 'pacto de país' necesario para evitar 'el perjuicio' que supone para el euskera su 'utilización política' y para situar a esta lengua 'por encima de opciones políticas que se decantan a favor o en contra'.
Los expertos calificaron la situación del euskera como 'esperanzadora' y resaltaron la 'positiva respuesta social' en zonas de Navarra y el País Vasco francés donde 'la situación política no es muy halagüeña para la normalización del euskera'. Así, se concluye que el euskera debe llegar a convertirse en un 'idioma social' y 'de referencia dentro de un ámbito bilingüe' y se aprecia como un punto 'desfavorable' el que el castellano tenga 'cada vez mayor presencia'.
Entre los asistentes se encontraban el presidente del Instituto Cultural Vasco, Erramun Bachoc; el director de HABE, Jokin Azkue; la secretaria de la ejecutiva del PNV, Josune Ariztondo; el vicepresidente de la Fundación Sabino Arana, José Luis Aurtenetxe, y el vicesecretario de Euskaltzaindia, José Luis Lizundia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 22 de junio de 2001