El primer paso a una posible repatriación está dado. La Diputación de Vizcaya cerró ayer un informe en el que incluye la identidad y circunstancias de una veintena de menores extranjeros especialmente conflictivos, de los casi 90 que actualmente están acogidos en el centro de Loiou. Ricardo Ansotegi, diputado de Acción Social, comunicará hoy la resolución a las Juntas Generales. Paralelamente, se remitirá el listado a la Fiscalía de Menores del País Vasco, que dirá la última palabra.
La cifra de veinte jóvenes podría variar si la fiscalía entiende que no todos los incluidos en la propuesta pueden acogerse a la reagrupación familiar o, en su defecto, al ingreso en un centro, tal y como establece la Ley de Extranjería en el caso de los menores. También cabe la posibilidad de que considere que algunos de los menores han falseado su edad, lo que facilitaría su expulsión. La dirección de la residencia de Loiu calcula que el 75% de los que declaran ser menores tienen en realidad más de 18 años. Dentro del los trámites para repatriar a los menores a Marruecos, de donde procede la casi totalidad, Ansotegi se reunirá esta semana con Enrique Menéndez, subdelegado del Gobierno en Vizcaya. La pasada semana ya mantuvieron un primer encuentro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 26 de junio de 2001