Dos agentes de la Guardia Civil, el conductor de una ambulancia y una funcionaria de prisiones ayudaron en el parto de una interna del Centro Penitenciario de Alcalá de Guadaira que se produjo, cuando se dirigían a un hospital de Sevilla, en la circunvalación de Sevilla, la SE-30.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 27 de junio de 2001