Los familiares de los dos hombres que el 23 de julio de 1999 fallecieron en el interior de un pozo de aguas residuales en Jaén han acudido a la vía penal de la justicia y reclaman indemnizaciones que llegan hasta los 99 millones de pesetas. En la Audiencia Provincial se vio ayer el caso por el fallecimiento de estos dos trabajadores en la finca Vega la Reina, situada en Jaén capital. Los familiares de Antonio García Contreras, de 52 años, y de Pedro Francisco Arenas Hernández, de 33 años y primo del empresario que los contrató, son los que reclaman las indemnizaciones.
A la viuda de Antonio, Francisca López, le reconocieron que su esposo falleció en un accidente laboral tras la demanda interpuesta en los juzgados social en octubre del año pasado. Sin embargo, en mayo se celebró otro juicio interpuesto por los allegados del trabajador más joven y no se reconoció que fuese accidente laboral.
La sentencia decía que Pedro Francisco Arenas limpió el pozo por iniciativa propia, lo que supuso 'imprudencia temeraria con la falta total y absoluta de nexo causal entre el trabajo que debía realizar y que le estaba encomendado y el fallecimiento por penetrar imprudentemente en el interior del pozo'. Ambas sentencias están recurridas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de junio de 2001