El consejero de Industria en funciones, Josu Jon Imaz, aseguró ayer que el Ejecutivo ha estado al corriente de la decisión de Ericsson de vender su fábrica de Zamudio, aunque confió en la capacidad de la multinacional sueca para conseguir nuevos socios que permitan su continuidad.
La firma de equipos de telecomunicaciones anunció el martes que busca un socio que se haga cargo de su fábrica de Zamudio, en la que trabajan 440 personas. Imaz, quien visitó ayer en Asparrena las obras de rehabilitación de la central hidroeléctrica de Araia, explicó que la multinacional se puso el lunes en contacto con el Ejecutivo para explicarle su situación, informa Efe. Imaz reconoció que la situación del sector de las telecomunicaciones es 'delicada', pero aseguró tener confianza en las capacidades tecnológicas de la planta de Zamudio, fundamentalmente dedicada a actividades de I+D, y 'a su capacidad de alcanzar nuevos socios que permitan que una actividad tecnológicamente avanzada como la que se desarrolla en Zamudio pueda seguir adelante'.
El portavoz recalcó que los compromisos adquiridos con el Gobierno y por los que Ericsson recibió ayudas 'están cumplidos' y reiteró que el Ejecutivo facilitará nuevas ayudas a través del Programa Ekimen en la medida en que se acometan las inversiones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 28 de junio de 2001