La Consejería de Educación reforzará el próximo curso la seguridad de los vehículos dedicados al transporte escolar y de menores, servicio que usan unos 75.000 escolares andaluces. Este plan pretende mejorar también la organización y funcionamiento de este servicio y facilitar su utilización por menores discapacitados.
Con la aplicación de estas medidas, los vehículos de transporte escolar no podrán superar al inicio del curso 2001-2002 los 10 años de antigüedad desde su primera matriculación. Además deberán estar equipados con limitadores de velocidad y dispositivos de frenado antibloqueo. Los autobuses, que en ningún caso podrán ser de dos pisos, tendrán que contar con una serie de plazas reservadas cerca de las salidas para personas con problemas de movilidad.
También será obligatoria la presencia de un acompañante mayor de edad que conozca las medidas de seguridad y que las salidas de emergencia estén señaladas con distintivos de colores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 3 de julio de 2001