Los grupos de la oposición en las Cortes Valencianas discreparon ayer de la afirmación del presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana -quien el martes descartó cualquier remodelación del Consell dada 'la buena marcha de las cosas'-, y reclamaron cambios en el Gobierno valenciano por considerar que 'hay motivos más que sobrados' para llevarlos a cabo, ya que está 'agotado' y 'alejado de la realidad'. El PP replicó de inmediato para señalar que 'si la opinión ciudadana contara, sería la oposición la que se remodelaría entera'.
Andrés Perelló, portavoz adjunto del Grupo Socialista, manifestó que, pese a lo que dice el presidente de la Generalitat, 'hay motivos más que sobrados para remodelar un Gobierno que es imposible que aguante lo que queda de año'. El diputado socialista enumeró 'tres pequeños ejemplos': la 'desastrosa' política sanitaria, los 'graves problemas' en la educación pública, que tiene una 'deficiente calidad, carencia de infraestructuras y problemas de personal', y la existencia de un 'endeudamiento que no se ha visto justificado por un progreso en las inversiones sociales'. Según Perelló, Zaplana 'dice que no hace falta una remodelación y que todo va bien porque está en la fase de ceguera que produce el atracón de poder, marcada por la manipulación mediática y por una aureola de flashes y de canciones de Julio Iglesias, y de una corte que le adula'. El presidente valenciano sigue 'la tónica general del PP que encabeza Aznar, y que consiste en enrocarse frente a las dificultades', añadió.
Por su parte, el portavoz de EU, Joan Ribó, señaló: 'Si Zaplana cree que no hace falta una remodelación quizá debería ponerse las gafas de la realidad, porque su Gobierno está parado y es incapaz de afrontar muchos de los problemas de la Comunidad Valenciana'. Según Ribó, el Consell 'está agotado y necesita cambios en profundidad'.
Sin embargo, el portavoz del Grupo Popular, Alejandro Font de Mora, consideró que si hubiera que remodelar basándose en la opinión de los ciudadanos, sería la oposición la que se 'remodelaría entera' y sus miembros tendrían que 'irse a casa'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de julio de 2001