Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra

Junta de fiscales

La trascendencia del caso Alberola, de momento en diligencias previas en manos de la Sala de Lo Civil y Penal del TSJ, tras la denuncia que se presentó en el Juzgado de Instrucción número dos de Valencia, es tal, dado que se ve imputado un magistrado, que en su momento será necesario convocar a la Junta de Fiscales de Sala de Valencia para decidir sobre la calificación y el procesamiento. El juez Alberola sería, después del caso de Javier Gómez de Liaño, el segundo en el que un magistrado es juzgado por el que se considera el delito más grave que puede cometer un juez dentro del ejercicio de la administración de justicia: la prevaricación, dictar sentencias a sabiendas de que son injustas. Delito por el que aún está pendiente de un posible juicio el ex juez Lluís Pascual Estevill.

La Junta de Fiscales de Sala determinará, cuando se concluyan las diligencias previas, cuál es la calificación sobre los hechos y la conveniencia de que sea juzgado por ellos. Los plazos para terminar las investigaciones no se pueden precisar, quedan aún pendientes varias periciales documentales y testimoniales.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de julio de 2001