El municipio de Orduña, la única área vizcaína actualmente con problemas de abastecimiento de agua, tendrá garantizado el suministro en 2003 merced a una balsa artificial que empezará a construirse tras este verano, con un coste de 850 millones. Esta zona sufre problemas desde 1995 durante los veranos debido a la contaminación de sus acuíferos. La Diputación inauguró ayer nuevas instalaciones para la desinfección y mejora del agua de consumo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de julio de 2001