La innovación valenciano es un sistema débil dentro de otro sistema débil como es el español, aseguran los autores del libro. La Comunidad dedica a I+D+i (innovación, desarrollo e investigación) el 0,62% de su PIB frente al 0,89% de media española y el 1,86 de la UE. El gasto valenciano representaba en 1999 el 6,6% de lo invertido en España y también del personal investigador, y 6,9% en cuanto a empleados de investigación, explicó ayer en la presentación del libro el secretario de la CEV, Pedro Coca.
El gasto de la empresa valenciana es inferior a la media española -un 33% frente a un 52%-, en las universidades locales más alto que en las de fuera -un 55% frente a un 30%-, y en las Administraciones públicas, menos que la media estatal -un 10% frente a casi un 17%-. La intensidad de innovación (gasto en I+D, dividido por la cifra de negocio) oscila entre el 1,12% valenciano y el 1,64% español.
En el capítulo de deficiencias, el informe, patrocinado por la Fundació Bancaixa, y elaborado por 15 investigadores, destaca la infrautilización de las infraestructuras con que cuenta la Comunidad como soporte a la innovación: cuatro Centros Europeos de Empresas e Innovación (CEEI), una red de 16 institutos tecnológicos y un parque, donde 10 años después de su inauguración sólo tienen su sede 22 empresas, cuatro fundaciones Universidad-Empresa y seis Oficinas de Transferencia de Tecnológica del CSIC (OTRI).
El secretario de la CEV, director además del libro, destacó además la escasa cooperación entre empresarios -'existe un cierto estigma por intercambiar información', dijo-, la falta de información sobre las posibilidades de I+D, el farragoso proceso al que tienen que hacer frente las pymes para embarcarse en los programas de investigación, la descoordinación entre universidad y empresa en cuanto a la formación que se necesita y la que se imparte, y 'una excesiva presión' sobre los institutos tecnológicos para que alcancen la autofinanciación, que, en ocasiones, los desvía de su intencionalidad inicial.
El estudio realiza 60 propuestas en materias como la formación, la financiación, la información, etcétera, para mejorar, en colaboración con el Plan Valenciano de la Investigación de la Generalitat, la transferencia de tecnologías a la empresa valenciana. Entre las propuestas se encuentra el reforzar la imagen de la Formación Profesional, crear nuevas titulaciones y crear la figura del tecnólogo.
El vicepresidente de la Generalitat, José Joaquín Ripoll, pidió más inversión privada en investigación hasta equilibrar el gasto al 50% en un horizonte de seis años, que coincide con la recepción de fondos estructurales europeos. Ripoll insistió en la necesidad de cooperación entre las instituciones públicas y privadas para poder mejorar el sistema empresarial de la Comunidad. Para Ripoll, la base para la mejora de las tecnologías en las empresas es 'la colaboración entre instituciones, entre lo público y lo privado, entre las empresas del mismo sector y entre las de distintos sectores'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de julio de 2001