La bailaora Inmaculada Aguilar, que ha impartido uno de los cursos que componen la oferta formativa del Festival de la Guitarra Córdoba 2001, aseguró que 'el único secreto del baile es el trabajo y el esfuerzo diario'. Aguilar consideró 'fundamental' para la formación de los jóvenes que se quieran iniciar en este mundo 'las ganas de trabajar y hacer caso a quienes les puedan enseñar bien', ya que 'deben tener claro que nunca se termina de aprender, que todos los días se puede aprender algo nuevo'. No obstante, la artista cordobesa, que dijo haber empezado a bailar con tan sólo tres años, reconoció que para cualquier tipo de danza 'se necesitan unas cualidades innatas, como una buena colocación, resistencia, elasticidad o flexibilidad'. En lo que se refiere al baile flamenco en particular, Aguilar señaló como un requisito 'indispensable' para los aspirantes a bailaores 'que posean sentido del ritmo, pues éste debe siempre ir íntimamente unido al flamenco'. Inmaculada Aguilar, nacida en Córdoba en 1959 y que se inició en el baile por imitación de su hermana, bailarina de ballet clásico, dijo que para ella es 'toda una satisfacción' enseñar todo lo que sabe a sus alumnos. La artista, que ha sido la directora del curso del Festival de la Guitarra titulado Técnica y Coreografía del baile Flamenco, celebrado entre el 7 y el 11 de julio, advirtió, no obstante, de la dificultad que tiene la docencia, si bien reconoció que también es 'muy difícil' aprender los secretos del baile. En cualquier caso, ella asegura que cuando se dispone a bailar, sea en una vertiente o en otra, se olvida de esa complejidad y lo que intenta es 'simplemente disfrutar'. Inmaculada Aguilar ingresó con ocho años en la Escuela de Arte Dramático y Danza de Córdoba, con 16 obtuvo el título de profesora de danza y a los 19 pasó a formar parte del personal docente de este centro.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 14 de julio de 2001