Las personas cambian, la naturaleza cambia, el clima cambia, la sociedad cambia, las modas cambian... Las leyes también deberían cambiar para estar al nivel de las exigencias sociales.
El ministro Rajoy ha dicho que no negociaría nada que no estuviera dentro del marco jurídico y político del País Vasco. Esto hace que me pregunte: ¿cuál es la manera de conseguir innovaciones dentro de un estatuto establecido y, por lo que se advierte después de las elecciones en Euskadi, obsoleto?
El Gobierno debería aprender de sus errores, como el planteamiento por el que apostó en las citadas elecciones, abrirse a los resultados que éstas determinaron y estar dispuesto a conseguir un marco legal que satisfaga a los electores vascos.
No demuestra nada más que estancamiento y centralismo el hecho de que no se avenga a renegociar dicho estatuto.
Debería darse cuenta de que Euskadi no se puede gobernar cordialmente sin aceptar la realidad de que el pueblo vasco quiere autodefinirse.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 14 de julio de 2001