El presidente del Getafe Club de Fútbol, el constructor Felipe González, renunció ayer, mediante acta noctarial, al 98% de las acciones de la entidad. Tres grupos empresariales se han interesado por la adquisición del club y se espera que antes de que termine el mes se conozca si el Getafe continúa o desaparece por los 430 millones de pesetas en deudas que arrastra.
Con la renuncia de González, el Ayuntamiento de Getafe recupera el 47% de las acciones, ya que el constructor no había desembolsado los más de 200 millones que suponía esta transacción. El concejal de Deportes, Santos Vázquez, anunció ayer que el Consistorio no se hará cargo del club. Por ello, dio dos opciones: o se encuentran nuevos inversores que asuman las condiciones del Ayuntamiento, o la entidad desaparece. El empresario que compre el Getafe deberá sufragar los 430 millones de deuda, construir la futura ciudad deportiva del club, comprar las acciones del Consistorio y hacerse cargo de las escuelas deportivas. Todo ello supone, según el edil, unos 1.800 millones de pesetas.
El concejal de Deportes explicó que hay tres grupos empresariales (dos de la localidad y otro de fuera) interesados en la adquisición del Getafe. El que cuenta con más posibilidades de hacerse con la entidad es Millenium, una empresa dedicada a la representación de deportistas y actividades públicas.
González compró el club el 21 de septiembre del año pasado. Entonces señaló que acudía al fútbol 'con mucha ilusión'. Entonces el Getafe estaba en Segunda A y con una deuda de 126 millones de pesetas. Ahora ha descendido de categoría y su pasivo asciende a 430 millones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 18 de julio de 2001