El rey Mohamed VI de Marruecos manifestó en una recepción concedida el lunes a una delegación de la CEOE, que el problema de la emigración ilegal se solucionaría con 'una política de desarrollo acelerado'.
Durante el encuentro, celebrado en Tánger, el monarca felicitó a los empresarios españoles por su voluntad de 'desarrollar, diversificar y confortar sus inversiones en Marruecos', y subrayó la importancia del trabajo efectuado por los empresarios españoles en materia de medianas y pequeñas empresas. Sin embargo, concluyó que 'eso no debe camuflar problemas como la emigración ilegal y sus dramas'.
Por su parte, el presidente de la CEOE, José María Cuevas, expuso en su discurso que 'los empresarios españoles están dispuestos a contribuir en la regulación del flujo migratorio entre los dos países a través de un programa de formación y contratos de trabajo regulares según las necesidades de los sectores'. El presidente de la patronal explicó que la CEOE desea 'al sur del Estrecho de Gibraltar, un Marruecos rico y fuerte que sea un socio y un aliado permanente de España como lo son otros vecinos como Francia y Portugal'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de julio de 2001