'No sé qué está pasando en Madrid últimamente durante el mes de julio, pero los remansos que antes aquí se daban en verano, ahora han desaparecido', dice Lucía, estudiante. 'Parece que nadie se va de vacaciones, porque el follón diurno y nocturno crece exponencialmente durante el verano, cuando anteriormente quedarse en verano en Madrid, siquiera por las noches, brindaba una cierta tranquilidad'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de julio de 2001