Aznar contradijo todas las previsiones y eludió cualquier referencia a la Conferencia Política del PSOE y a su líder, Jose Luis Rodríguez Zapatero. Sus intervenciones públicas en Santiago de Compostela las dedicó íntegramente a la denuncia de los nacionalismos y a su próxima entrevista con Ibarretxe, el 30 de julio.
el presidente aclaró que el interés primordial de su entrevista con el lehendakari es abordar el reto terrorista. Recordó el compromiso adquirido por Ibarretxe durante la campaña electoral de establecer esa prioridad, e incidió en esta cuestión: 'En el País Vasco hay un problema y es el terrorismo. Los vascos no son libres; son extorsionados por los que matan. Esto es muchísimo más importante que ser de un sitio o de otro o que ser nacionalista. Es ésa la responsabilidad que le voy a exigir
Pero Aznar estuvo más incisivo con Ibarretxe que en su intervención en El Escorial el pasado jueves, donde le pidió que se definiera si estaba o no por la independencia de Euskadi. Ayer puso en duda que el lehendakari esté de acuerdo con la derrota de ETA. El presidente del Gobierno cree que Ibarretxe y la dirección del PNV tienen dudas de que el fin de los terroristas no conlleve la caída en picado de la influencia del nacionalismo. '¿No será que a algunos no les interesa la derrota de ETA porque puede entenderse como la derrota de una parte de sus postulados? Dicen que comparten los fines, pero no los medios. Es una pregunta muy importante de contestar'.
Aznar dejó claro que pretendía una respuesta clara de Ibarretxe a esta cuestión en su entrevista en La Moncloa y la rubricó con una expresión de firmeza: 'ETA será derrotada por el Estado de derecho. Tiene que quedar muy claro y, además, espero que lo veamos'.
También reivindicó el origen constitucional y estatutario del nombramiento de Ibarretxe como presidente vasco. Y aprovechó para exigirle que antepusiera los ideales democráticos a sus ideales nacionalistas. 'Usted es hijo de la legitimidad democrática. Por tanto, hay que respetar las reglas de juego. Y por tanto, antes de ser nacionalista hay que ser demócrata'.
Tras desgranar las claves de lo que será su entrevista con Ibarretxe, abordó ante el grupo del Partido Popular Europeo (PPE) del comité de las regiones su visión de las posibilidades que ofrece el Tratado de Niza para 2004. Aclaró que el Estado de las autonomías es el que mejor se ajusta en España a las necesidades del entramado constitucional. En este sentido, despejó la interrogante de que pueda haber reformas de ese entramado que puedan aproximar a España a un modelo como el alemán. 'Todos los sistemas son respetables. Ninguno ha de ser impuesto a nadie. El Estado de las autonomías es el que mejor se ajusta a las necesidades de España'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 22 de julio de 2001