El gobierno municipal del Ayuntamiento de Valencia anunció ayer que desviará la circulación de vehículos de la Lonja -edificio declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco-y la iglesia de los Santos Juanes de Valencia, ubicados uno frente al otro y muy cerca del popular Mercado Central. Las condiciones de protección de la Lonja han sido duramente criticadas por las asociaciones vecinales del barrio que acusan al Ayuntamiento de no mantener en condiciones el emblemático edificio. Los concejales populares de Urbanismo, Miguel Domínguez, y de Circulación, Jorge Bellver, anunciaron ayer que ampliarán la calle de la Botella en 11 metros -callejón de espaldas a la Iglesia de los Santos Juanes que conecta la calle Bolsería con la Avenida del Oeste- de forma que absorba el tráfico y permita el estacionamiento de vehículos. 'Se trata del primer paso para la peatonalización de un área', apuntó Bellver. El proyecto incluye los accesos a los futuros aparcamientos que albergará el Mercado Central.
La comisión de gobierno también abordó el registro de solares realizado en el barrio del Mercat. Esta lista elaborada por el Ayuntamiento se otorga un año, desde la inscripción, a los propietarios de solares sin edificar para que soliciten licencias de obras. En caso contrario, la ciudad opta a la propiedad de los mismos. De las 17 órdenes de ejecución emitidas por el Ayuntamiento, 12 propietarios solicitaron licencias de actuación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 24 de julio de 2001