El sector pesquero de la provincia de Cádiz mostró ayer su rechazo al reglamento de reestructuración de la flota pesquera propuesto por la UE para los barcos afectados por la falta de tratado con Marruecos. Según los pescadores, este plan no incluye ningún tipo de ayudas y conduce al desguace a 62 buques andaluces que faenaban en el caladero africano, de los que 51 son de Cádiz.
El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Barbate, Antonio Baro, advirtió ayer de que este plan provocará 'una destrucción masiva' de puestos de trabajo.
El portavoz de la plataforma en defensa del sector pesquero barbateño, Juan Pedro Moreno, lamentó que este plan comunitario no incorpore 'las medidas sociales prometidas por el Gobierno central para Barbate'.
Por su parte, el responsable de pesca de UGT Andalucía y secretario de la cofradía de El Puerto de Santa María, Antonio Carbonell, expresó también su rechazo por los términos aprobados por Bruselas, al tiempo que lamentó las dificultades que está encontrando esta organización sindical para movilizar al sector pesquero.
Según explicó, la concesión de ayudas económicas de 151.500 pesetas mensuales a los marineros afectados por el amarre forzoso de la flota 'ha aletargado' a los pescadores. 'Está siendo muy difícil hacerles despertar', dijo Carbonell. Ante esta situación, UGT establecerá contactos con los marineros para informarles de que estas ayudas finalizan en el mes de diciembre y que 'es necesario que el sector se movilice'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 25 de julio de 2001