La sección tercera de la Audiencia de Valencia ha condenado a tres años y seis meses de cárcel a Juan B. M., de 47 años, por abusos sexuales a dos menores de 13 y 15 años. El condenado entabló contacto con las víctimas en los recreativos Guillem, en el municipio de Canals.
Los hechos ocurrieron durante los meses de mayo y junio de 1998. El ahora condenado utilizaba el tabaco o un refresco para iniciar conversación con los menores y después les proponía ir a un lugar apartado. En la primera ocasión que se materializó el contacto sexual, según consta en la sentencia, el condenado condujo a los menores hasta las vías del tren, en las afueras de la localidad. Allí, se masturbaron mutuamente y el acusado penetró analmente al menor de 15 años. Los encuentros se repitieron varias veces, una de ellas en el domicilio del pederasta, y los menores recibían a cambio entre 7.000 y 8.000 pestas. El 22 julio de 1998, las madres de los menores presentaron denuncia ante la Guardia Civil.
Se da la circunstancia de que el menor de 15 años tiene un déficit intelectual leve que dificulta su capacidad de comprensión. La sentencia, en el capítulo de hechos probados, considera que ello le afecta en el aprendizaje y le califica de 'inmaduro, desatento y fácilmente influenciable'.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 26 de julio de 2001