Hasta el momento, sólo hay cuatro centros de salud licitados por Sanidad de los 38 que cuentan con partida presupuestaria este año. Dos de ellos son los centros auxiliares de Elda y el barrio de La Coma en Valencia, ambos adjudicados el año pasado y que para 2001 cuentan con un presupuesto de 78 y 49 millones de pesetas, respectivamente. A ellos se añaden los adjudicados este año en Albocàsser y Ayora, que cuentan con por 50 y 96 millones de pesetas de inversión prevista, como apunta el PSPV.
Más allá de estos movimientos presupuestarios, la consejería que dirige Serafín Castellano no ha dado un paso para llevar del papel a la realidad los millones de pesetas destinados a cubrir los gastos de las obras programadas para este año en atención primaria correspondientes a nuevos centros. Según la diputada socialista María José Mendoza, el adelanto del cierre presupuestario ordenado por el consejero de Economía, Vicente Rambla, supondrá que los 34 centros que contaban teóricamente con fondos, junto a los cuatro ya licitados, no saldrán del papel de los presupuestos y sus obras se quedarán congeladas. Entre ellos están los centros de San Blas de Alicante, Sedaví, Almusafes, la Pobla Llarga, Alboraia, Campanar, l'Alfàs del Pi, Tabernes Blanques u Ontinyent. Todo ello a menos que Economía autorice nuevas obras.
Mendoza apunta que se ha realizado una particular licitación en los centros de Benidorm, Novelda, Natzaret, Guillem de Castro -ambos en Valencia- y Benicalap. Esta maniobra consiste en sacar a licitación aspectos que no suponen obras. En este caso, se adjudican cuestiones como el proyecto arquitectónico, o estudios de seguridad del edificio, que, no implican edificación alguna. Sanidad ha destinado 30 millones de pesetas por cada uno de estos centros.
Para la diputada socialista, este escenario repite la situación del año pasado. En este caso, de cada 100 pesetas destinadas a construir nuevos centros de salud sólo se gastaron finalmente 31, lo que provoca, como destaca María José Mendoza, que año tras año se consignen fondos que se arrastran sin que finalmente se emplee una peseta de los millones previstos. Esta situación supone el 'aplazamiento de forma interminable' de la reforma de la atención primaria y la sustitución de los antiguos consultorios y ambulatorios en centros de salud, uno de los principales objetivos de Sanidad. De hecho, la memoria del Comité Econòmic y Social de 2000 recogía en el apartado dedicado a atención primaria que la población cubierta por el nuevo modelo asciende al 89% y apunta que 'si bien ha aumentado la cobertura con respecto a años anteriores, todavía falta por cubrir un 13%' de la población. 'Esa diferencia de cobertura', apunta el informe, ' se traduce en un tratamiento diferencial'.
Mendoza subrayó el retraso en la extensión del nuevo modelo de atención primaria que está sufriendo la sanidad valenciana durante los últimos años. La diputada socialista apuntó que entre 1990 y 1995 se consiguió aumentar la población atendida por centros de salud en un 40%, mientras que en los últimos años sólo se ha aumentado un 18%. Además apuntó que el territorio Insalud ya atiende al 99% de los pacientes, frente al 89% de la red sanitaria pública valenciana.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de julio de 2001