Horas antes, el Ejército israelí secuestró en el norte de Cisjordania a dos activistas del partido gubernamental palestino Al Fatah. La operación fue protagonizada por el mismo comando de soldados disfrazados de árabes que en las últimas semanas ha secuestrado a más de 40 personas. Esta nueva política, denominada de "interceptación de terroristas", fue propuesta por los elementos más liberales del Gobierno israelí como alternativa a las "ejecuciones selectivas" de palestinos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de julio de 2001