La Diputación de Vizcaya subvencionará este año con 433 millones de pesetas a 39 entidades que trabajan en el territorio contra la exclusión social. Las ayudas suponen un incremento del 33% respecto a lo concedido en 2000 y beneficiarán a alrededor de 8.000 personas.
Los beneficiarios son un colectivo muy variado: desde desempleados y drogadictos hasta personas relacionadas con la prostitución o que padecen diversas enfermedades, según los datos aportados ayer por el diputado foral de Acción Social, Ricardo Ansotegi. El grueso, casi 300 millones se repartirán entre las diez entidades más importantes, entre las que destacan la asociación Bizitegi, con 52 millones; Askabide, con 36; Caritas, con 35, y Etorkintza, con 30 millones.
Los casi 450 millones que aportará este año la Diputación servirán para financiar 61 proyectos presentados por las distintas asociaciones y para atender a un total de 8.099 personas. Ansotegi destacó que algunas instituciones recibirán un incremento más notable de ayudas que otras con respecto a 2000, 'porque en la medida que hay nuevos programas, que son nuevas necesidades, nosotros se las subvencionamos'. Entre los aumentos más notables se encuentra el de Emaus Fundación Social, con un incremento de las subvenciones en un 150%.
Las actuaciones que desarrollan estas entidades van desde viviendas tuteladas, centros de acogida y programas de atención específicos, hasta talleres ocupacionales y de desarrollo de habilidades sociales, actuaciones para el empleo o comedores sociales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 31 de julio de 2001