Todos los trabajadores de Sintel están hoy pendientes de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos del Gobierno para decidir si ponen fin a su lucha. Esta comisión tiene previsto estudiar el plan definitivo que incluye todas las medidas económicas y sociales para solucionar el conflicto de Sintel, que dura ya más de un año.
El principal escollo para aprobar el plan radica en el crédito del Instituto de Crédito Oficial (ICO) que piden los sindicatos para pagar las nóminas atrasadas. Este crédito, con una cuantía de unos 2.000 millones de pesetas, permitiría que los trabajadores cobrasen las 11 nóminas que se les adeudan desde que Sintel, filial de Telefónica hasta 1996, suspendió pagos el año pasado. Fuentes sindicales aseguran que existen 'resistencias' por parte del Ministerio de Economía a aprobar ese crédito, una medida con la que el resto de los ministerios implicados -Ciencia y Tecnología y Trabajo- está de acuerdo, según estas fuentes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 2 de agosto de 2001